De mal en peor: Dato mata relato
Frente a la clara inoperancia del macrismo en la economía, los kirchneristas buscan imponer nuevamente su relato y se jactan de tener las herramientas necesarias para arreglar la situación del país, que paradógica y parcialmente, ellos mismos generaron.
Los políticos argentinos siempre se excusan que para mínimamente realizar cambios profundos y dejar índices estabilizados, necesitan que su partido gobierne como mínimo dos mandatos presidenciales seguidos. Cristina Fernandez de Kirchner los tuvo, así que analizemos los datos: ¿Cómo recibió el país nuestra ex mandataria y cómo lo dejó? ¿Y el macrismo?
Cuando CFK asumió en diciembre de 2007, recibió los siguientes índices: Inflación del 16% (cabe destacar que el Instituto Nacional de Estadisticas y Censos de la República estaba intervenido y decía que era del 8,8%), superávit fiscal de 25 mil millones de pesos, pobreza del 26%, desocupación del 8,7% y una actividad económica que había crecido al 8,7% anual.
8 años después, en diciembre de 2015, el Frente para la victoria dejó el poder con: 30% de inflación (14% más que en 2007) y a eso hay que agregarle que estaba estancada debido al cepo al dólar y el congelamiento de tarifas que había, por lo cual era una de las tantas “bombas de tiempo” que heredó Cambiemos. A su vez pasamos de tener superávit fiscal a déficit del 4,1% del PBI, pobreza del 26% al 29,7% y una actividad económica que bajó a 2,1% en ese mismo año. Por último destacar que la desocupación subió 0,5%, cerrando en 9,2% y el riesgo país tuvo picos de 2000 puntos, a lo largo de la gestión.
Lamentablemente vamos de mal en peor, el macrismo en términos económicos empeoró todos estos índices. Mayor inflación (45%), pobreza (32%) desocupación (9,1%), etc. Lo único que podría “justificarlos”, pura y exclusivamente frente a un debate con el kirchnerismo, es que ellos no heredaron un país “estabilizado” como sí lo era el de 2007.
En fin, como siempre el dato mata al relato, ni el peronismo kirchnerista puede plantear que es la solución ya que es gran parte del problema, ni el oficialismo puede decir que su plan económico prosperó durante estos casi 4 años. Como siempre, entre trinchera y trinchera quedamos los argentinos que pagamos los platos rotos.
“Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo.” Abraham Lincoln
Los políticos argentinos siempre se excusan que para mínimamente realizar cambios profundos y dejar índices estabilizados, necesitan que su partido gobierne como mínimo dos mandatos presidenciales seguidos. Cristina Fernandez de Kirchner los tuvo, así que analizemos los datos: ¿Cómo recibió el país nuestra ex mandataria y cómo lo dejó? ¿Y el macrismo?
Cuando CFK asumió en diciembre de 2007, recibió los siguientes índices: Inflación del 16% (cabe destacar que el Instituto Nacional de Estadisticas y Censos de la República estaba intervenido y decía que era del 8,8%), superávit fiscal de 25 mil millones de pesos, pobreza del 26%, desocupación del 8,7% y una actividad económica que había crecido al 8,7% anual.
8 años después, en diciembre de 2015, el Frente para la victoria dejó el poder con: 30% de inflación (14% más que en 2007) y a eso hay que agregarle que estaba estancada debido al cepo al dólar y el congelamiento de tarifas que había, por lo cual era una de las tantas “bombas de tiempo” que heredó Cambiemos. A su vez pasamos de tener superávit fiscal a déficit del 4,1% del PBI, pobreza del 26% al 29,7% y una actividad económica que bajó a 2,1% en ese mismo año. Por último destacar que la desocupación subió 0,5%, cerrando en 9,2% y el riesgo país tuvo picos de 2000 puntos, a lo largo de la gestión.
Lamentablemente vamos de mal en peor, el macrismo en términos económicos empeoró todos estos índices. Mayor inflación (45%), pobreza (32%) desocupación (9,1%), etc. Lo único que podría “justificarlos”, pura y exclusivamente frente a un debate con el kirchnerismo, es que ellos no heredaron un país “estabilizado” como sí lo era el de 2007.
En fin, como siempre el dato mata al relato, ni el peronismo kirchnerista puede plantear que es la solución ya que es gran parte del problema, ni el oficialismo puede decir que su plan económico prosperó durante estos casi 4 años. Como siempre, entre trinchera y trinchera quedamos los argentinos que pagamos los platos rotos.
“Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo.” Abraham Lincoln
Escrito por: Tomás Russo
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